Un entorno pequeño, de familia y pocos incondicionales

Nueva York – El entorno de Donald Trump es necesariamente pequeño, como le corresponde a un outsider.

La familia es lo primero. Se exhibe con su esposa Melania, es una exmodelo eslovena 24 años menor que él.

Ivanka, de 34 años, de su primer matrimonio, es la más cercana de sus hijas. Comparte con sus hermanos Eric (32) y Donald Jr. (38), la vicepresidencia del emporio empresarial familiar y es la responsable de su propia marca de ropa. En los últimos meses se reveló como una defensora incondicional de su padre, incluso en los asuntos más esponosos.

Donald Jr. Fue el más activo en la campaña, lo que le valió un sonado traspié, cuando compartió un programa de radio con un notorio supremacista blanco. Según se asegura, podría seguir pronto los pasos de su padre con alguna candidatura.

Fuera la de familia, Stephen Bannon, de 63 años, es el director de la “orquesta Trump”. Se trata de un periodista conservador conocido por sus posturas nacionalistas, antiestablishment y antiinmigración.

Kellyanne Conway, de 49, fue la directora de campaña, la primera mujer en haber jugado ese rol jamás con un candidato republicano. Fu quien le sacó varias veces las papas del fuego, tratando de apaciguar sus excesos retóricos. Sí, Trump a veces cree que las mujeres valen más por lo que piensan que por cómo lucen.

Dentro del establishment político más tradicional, hay que citar al gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, de 54 años, que pasó de rival en las primarias a temprano aliado. Será uno de los referentes más importantes del equipo de transición que deberá pactar con el de Barack Obama la entrega del poder el próximo 20 de enero.

Más tarde se sumó otro peso pesado: el exalcalde neoyorquino Rudolph Giuliani (72), quien le pasó su filosofía de mano dura contra el delito y lo defendió, para sorpresa de muchos, cuando arreciaron las denuncias de mujeres que dijeron haber sido acosadas sexualmente por Trump.